Bill Clinton

(William Jefferson Clinton) 42.º presidente de los Estados Unidos de América (Hope, Arkansas, 1946). Se formó como abogado en las universidades de Washington (Georgetown), Oxford y Yale; en esta última conoció a Hillary Rodham, con quien se casó en 1975. Entró en la política activa desde 1972 de la mano del Partido Demócrata, para el que trabajó en las campañas electorales de McGovern y Carter. Tras adquirir popularidad en su Estado natal como fiscal general, fue elegido gobernador en 1978; perdió las elecciones de 1980, pero volvió a ganar las de 1982, 1984 y 1986.

En 1992 fue propuesto por su partido como candidato a la presidencia frente al republicanoGeorge Bush; durante la campaña electoral procuró vincular su imagen a la memoria del asesinado presidente John F. Kennedy (también demócrata), con el que le unían su juventud, su habilidad oratoria, exquisita educación, estilo simpático y enérgico y un ambiguo programa de «cambio», capaz de atraer votos de las más diferentes procedencias.

Tras ganar esas elecciones ocupó la presidencia en 1993. Tanto durante la campaña como en la posterior acción de gobierno contó con dos colaboradores tan brillantes como el vicepresidente Al Gore y su propia esposa, Hillary Clinton, destacada militante de la causa feminista. Precisamente a ella le encargó desarrollar el proyecto emblemático de su programa, la implantación de un sistema nacional de salud; sin embargo, no pudo sacarlo adelante por la creciente oposición conservadora, materializada al obtener los republicanos mayoría en las dos cámaras en las elecciones legislativas de 1994.

Clinton dio un giro conservador a su política, con medidas como el recorte de las ayudas sociales o el endurecimiento del bloqueo a Cuba (1996). Consiguió así recuperar su popularidad, superando toda una serie de acusaciones personales que se le lanzaron desde su primera campaña presidencial (desde haber consumido drogas, haber eludido el servicio militar o haber sido infiel a su esposa, hasta haber manipulado a la Justicia para encubrir sus manejos inmobiliarios en el caso Whitewater). Logró así la reelección para un segundo mandato en 1996; pero las acusaciones de acoso sexual lanzadas desde la extrema derecha reaparecieron y pusieron a Clinton en graves aprietos.

Herbert Hoover

(Herbert Clark Hoover; West Branch, Iowa, 1874 – Nueva York, 1964) 31.er presidente de los Estados Unidos de América. Este cuáquero conservador, educado en la Universidad de Stanford, trabajó como ingeniero de minas en Australia y China. Durante la Primera Guerra Mundial (1914-18) el presidente Woodrow Wilson le encargó la organización del transporte de abastecimientos a los frentes de Europa.

Caracterizado como un liberal convencido de las virtudes del capitalismo individualista y competitivo, los republicanos le mantuvieron como secretario de Comercio durante las presidencias de Harding y Coolidge (1921-28); e incluso le promovieron a la presidencia en las elecciones de 1928, que ganó en medio de un clima de euforia económica que él mismo contribuyó a alimentar con su propaganda optimista.

No previó en absoluto la crisis bursátil de 1929, luego transformada en una depresión económica profunda y duradera, que pondría fin al tipo de capitalismo liberal que él conocía y defendía. Incapaz de hacer frente a la crisis, incluso agravó sus efectos al intentar combatirla con medidas contraproducentes, como la reducción del gasto público. Aquella crisis marcó todo su mandato (1929-33), impidiéndole cumplir las grandilocuentes promesas de prosperidad en las que había basado su campaña.

En política exterior fue aislacionista, procurando que los Estados Unidos se desentendieran de las tensiones de Europa y Asia, manteniendo el intervencionismo en Iberoamérica en defensa de sus intereses económicos. El descontento creado por la situación económica le hizo perder las elecciones de 1932 en beneficio del demócrata Franklin D. Roosevelt, quien corregiría a partir de 1933 el rumbo dado por Hoover tanto a la política exterior como a la política económica. Participó activamente en la oposición conservadora contra Roosevelt, defendiendo el aislacionismo incluso después de la Segunda Guerra Mundial (1939-45).

Winston Churchill

Sin lugar a dudas, una de las figuras clave del siglo XX. Su larga trayectoria política abarca desde su primera elección como diputado en 1904 hasta su último periodo como primer ministro en 1951. Gran figura del partido conservador británico, aunque también pasó por las filas del partido liberal.

Su trascendencia histórica se debe indudablemente a su papel en la Segunda Guerra Mundial, cuando dirigió al Reino Unido en su lucha contra Hitler. Durante el periodo de entreguerras Churchill fue poco comprendido. Furibundo conservador, sus medidas contra la huelga general de 1926, su apoyo a Eduardo VIII o su no disimulada simpatía por Franco le hicieron muy impopular entre la clase obrera británica. Sus advertencias ante la amenaza hitleriana y su posición favorable al rearme chocaron con una opinión pública mayoritariamente pacifista en los años treinta. Comentando su actitud ante un eventual ascenso al poder de Hitler, afirmó: «Si un perro se abalanza contra mí, le pego un tiro antes de que me muerda». Apartado de la política activa y aislado en su partido fue un crítico inmisericorde de la política de Chamberlain. Su comentario ante el Pacto de Munich fue el siguiente: «¿Cómo han podido hombres tan honorables y experimentados (…) avenirse a una política tan cobarde?».

Churchill alentó a la búsqueda de una gran alianza con Rusia y Francia que frenara el expansionismo nazi. El pacto de no agresión germano-soviético puso fin a esta esperanza.

Tras la anexión de Checoslovaquia, la postura largamente defendida por Churchill de firmeza ante Alemania se reveló como la correcta. Al estallar la guerra, fue nombrado Primer Lord del Almirantazgo y tras la invasión de Francia fue nombrado Primer Ministro.

Churchill formó un gobierno de unión nacional en el que que él desempeñó también el papel de ministro de Defensa. En su primer discurso ante la Cámara de los Comunes, el 13 de mayo de 1940, pronunció su célebre discurso en el que, tras afirmar que no tenía  nada que ofrecer al pueblo británico «excepto sangre, sudor y lágrimas», consiguió unir al pueblo británico en su esfuerzo de guerra contra Hitler.

Buscó desde un principio la alianza con Estados Unidos y su relación personal con Roosevelt facilitaron la progresiva implicación norteamericana. En agosto de 1941, en su primer encuentro con el presidente de EE.UU., firmaron Placentia Bay,  Terranova, la Carta del Atlántico, declaración común de principios.

Pese a su postura anticomunista, no dudó en buscar la alianza con Stalin. Churchill, fue, en definitiva, el gran forjador de la «Gran Alianza», EEUU, URSS y el Imperio Británico, que llevó a la victoria de los Aliados en la segunda guerra mundial. Como líder británico, participó en las distintas cumbres de los Aliados a lo largo de la guerra.

Sin embargo, en 1945 fuera derrotado en las elecciones por el laborista Atlee, quién le sustituyó en la Conferencia de Potsdam que se estaba celebrando en aquellos momentos.

Fuera del poder tuvo un papel destacado como abanderado de la unidad europea y partidario de una política de firmeza ante la Unión Soviética. En 1951 desempeñó por última vez el puesto de primer ministro.

Franklin Delano Roosevelt

Franklin Delano Roosevelt no fue un presidente más en los Estados Unidos. Tampoco fue sólo el presidente que sacó a la potencia del norte de la peor crisis económica de su historia, luego del crack bursátil de 1929. FDR fue también el único presidente norteamericano en conseguir cuatro mandatos presidenciales (y seguidos), fue quien dirigió al país durante la 2º Guerra Mundial y quien llevó a la economía nacional por rumbos entonces inexplorados: el keynesianismo.

Nacido el 30 de enero de 1882, en el Condado de Dutchess, en Nueva York, Roosevelt se crió en el seno de una familia acomodada, gracias a la fortuna hecha por su padre, James Roosevelt, miembro de la «landed gentry», la clase tradicional de ricos propietarios de tierras. Claro que su madre, Sara Ann Delano, también pertenecía a una familia acomodada y tuvo una mayor presencia en la educación de Franklin.

Gracias a su situación privilegiada, FDR tuvo la posibilidad de practicar deportes como la caza o la equitación y viajar por el mundo y aprender idiomas. En la primera década del nuevo siglo, se graduó en artes y moda en Harvard y luego llegó hasta el final de la carrera de abogado en Columbia.

Entretanto, se casó con Eleanor Roosevelt, sobrina del entonces presidente Theodore Roosevelt, quien también era un pariente no muy lejano. Los Roosevelt tendrían seis hijos, de los cuales cinco llegarían a viejos. Pero a diferencia del resto de sus familiares, de tradición republicana, como el ex presidente Theodore, los Roosevelt de Hyde Park, como se conocía al grupo de FDR, eran demócratas.

En 1910, el joven Franklin logró ser electo senador estadual de Nueva York. Dirigía entonces un grupo reformista que le permitió destacarse y ser llamado a ocupar la Secretaría de Marina, en 1912, de la mano del presidente demócrata Woodrow Wilson. Desde allí, dirigió las operaciones de Marina en América Central y el Caribe y las de la 1º Guerra Mundial, en tanto no lograba acceder al Senado nacional y era duramente derrotado como vicepresidente demócrata en las elecciones nacionales de 1920.

Luego de algunos años ocupado en arreglar los desengaños amorosos en que incurría y luego paralizado por un ataque de poliomielitis, FDR logró triunfar en las elecciones estaduales y se convirtió en gobernador de Nueva York para el período 1929-1932, luego de triunfar por 25 mil votos, en las más reñidas elecciones de la historia del estado.

Finalmente, una buena gestión y el hundimiento de la administración nacional republicana en la crisis de 1929, le dieron el espaldarazo necesario para alcanzar la presidencia de la nación en 1933. Los primeros años de gobierno fueron de grandes cambios. En plena entreguerras, FDR se concentró en delinear lo que se conoció como el New Deal, un ambicioso plan de intervención del Estado en la reconstrucción de la economía nacional, buscando reorganizar el capitalismo, estabilizar el sistema y contener las numerosas rebeliones que surgían al calor de la crisis.

Los importantes resultados, aunque la disputa contra los monopolios no fuera del todo exitosa, le dieron a FDR una gran legitimidad y reconocimiento de la población, que lo eligió sucesivamente en 1936, 1940 y 1944.  El 12 de abril de 1945, a los 63 años y habiendo recién asumido el nuevo mandato, falleció a causa de un cáncer.

John Kennedy

(Brookline, EE UU, 1917-Dallas, id., 1963) Político estadounidense. Fue el segundo de los nueve hijos de Rose Fitzgerald y Joseph Patrick Kennedy, un financiero que fue embajador en el Reino Unido durante la presidencia de Franklin D. Roosevelt. De educación católica, se graduó en Harvard. En 1941 se alistó en la marina y fue destinado al Pacífico, donde resultó herido cuando mandaba una lancha torpedera. No obstante, logró llegar a puerto con su tripulación salva, por lo que fue condecorado como héroe de guerra.

De regreso en Boston, decidió dedicarse a la política, y con tan sólo veintinueve años fue elegido diputado por el Partido Demócrata, escaño que mantuvo durante seis años. En 1952 resultó elegido senador por el estado de Massachusetts. Su imagen adquiría creciente popularidad merced a su apoyo a las políticas para mejorar las condiciones de la clase trabajadora, conseguir mayor seguridad social para la tercera edad y rebajar los alquileres y los precios. En 1953 contrajo matrimonio con Jacqueline Bouvier, con quien tendría dos hijos.

Durante sus años como senador se convirtió en el líder del ala liberal del partido Demócrata, y consiguió la nominación de candidato para las elecciones presidenciales del año 1960. Su rival fue el vicepresidente Richard M. Nixon, a quien venció por un estrecho margen de votos, para convertirse en el primer presidente católico de Estados Unidos y en el más joven de toda la historia del país. La campaña del candidato demócrata hizo hincapié en el desempleo, la alicaída economía y el nuevo gobierno prosoviético surgido en Cuba.

En su primer discurso como presidente, J. F. Kennedy definió a los enemigos comunes del hombre como «la tiranía, la pobreza, la enfermedad y la guerra». En política exterior, formó los Cuerpos de Paz y promovió la creación de la Alianza para el Progreso, con el objetivo principal de favorecer la cooperación social y económica con Iberoamérica. En su primer año como presidente, debió enfrentarse a una grave crisis originada por la fallida acción de bahía de Cochinos, un intento de invadir Cuba planificado por disidentes del régimen de Fidel Castro que contaban con el apoyo de la Central Americana de Inteligencia (CIA), plan que el nuevo mandatario heredó de la administración anterior. El desembarco se saldó con un rotundo fracaso militar.

Las tensiones con la URSS aumentaron aún más cuando Kennedy decidió establecer el bloqueo naval de Cuba, ante la comprobación de que en la isla se estaban montando misiles soviéticos de alcance medio, en octubre de 1962. Luego de negociaciones mantenidas por vía diplomática con el primer ministro Nikita Jruschov, se acordó el desmantelamiento de los misiles a cambio de la suspensión del bloqueo y de la promesa de que Cuba no sería invadida. Al acuerdo, considerado un triunfo personal del presidente, siguieron otros, como la firma de un tratado con la URSS y el Reino Unido que prohibía la experimentación con armas nucleares.

Kennedy murió asesinado en Dallas (Texas) en plena campaña para la reelección. Según la versión oficial, los disparos mortales fueron efectuados por Lee Harvey Oswald, quien fue a su vez asesinado días después por Jack Ruby, propietario de un club nocturno local. Una comisión formada especialmente para tratar de aclarar las circunstancias del magnicidio, la Comisión Warren, descartó cualquier posible complot para matar al presidente y mantuvo que Oswald había actuado por su cuenta, aunque otras teorías señalan la presencia de al menos dos francotiradores, que habrían sido respaldados por una conspiración urdida por cubanos anticastristas y miembros de la CIA o de la mafia.